Consejos para elegir verduras y hierbas

El secreto al elegir las verduras consiste en estar atentas a los catálogos de semillas y probarlas para encontrar las que se adapten mejor a su terreno y a su paladar.
Si nunca cultivo verduras le recomendamos empezar con aquellas que crezcan fácilmente y luego ir experimentando de a poco con las más complicadas.
Si no dispone de un lugar donde plantar, seleccione variedades que puedan sembrarse directamente en el suelo en el que el cultivo vaya a madurar, por ejemplo las judías verdes enanas o trepadoras.

Trate de elegir plantas que tengan épocas de recolección escalonadas para asegurarse de que estará ocupado cultivando durante el máximo periodo de tiempo posible. Allí donde el espacio sea muy limitado, experimente con técnicas que le permitan aumentar al máximo la cantidad de verduras que pueden cultivarse en poco espacio.
Es casi imposible evitar las plagas y las enfermedades pero para reducir al mínimo sus efectos, intente plantar cultivares resistentes.
La disponibilidad de estos varia de año a año, por lo que tendrá que consultar atentamente los catálogos de semillas y las etiquetas para lograr una selección adecuada. Opte por lo compactos porque están adaptados para crecer en un jardín pequeño.
Para agregar interés al terreno, elija especies atractivas algunas judías verdes enanas o trepadoras producen frutos violetas en lugar de los verdes más habituales y las verduras para ensalada se pueden conseguir en una gran variedad de color y forma de hojas hasta las rojas y escaroladas.
Los cebollinos, el romero, la salvia la mejorana, el perejil y la menta son productos esenciales para un jardín de hierbas.
Tenga en cuenta que la menta tiene un porte tan invasor que deberá plantarla en una maceta para poder controlarla. Muchas de las hierbas más exóticas, como el cilantro y el eneldo, se desarrollan bien en un terreno soleado y protegido y le aportaran un buen condimento durante todo el verano.
Consejos de plantas comestibles en macetas
Para cultivar verduras y hierbas así como algunos árboles frutales, pueden utilizarse jardineras, macetas, bolsas de cultivo e incluso canastas colgantes. Si lo hace de este modo podrá tener las plantas comestibles muy cerca de casa y hasta podrá disfrutar de un jardín de cocina en miniatura en un balcón o en la repisa de una ventana.
Todos los cultivos crecidos en macetas necesitan un abonado y un riego regulares para desarrollarse.
Las hierbas pueden ser muy productivas en macetas o incluso en una canasta colgante, especialmente si se concentra en las más pequeñas como los cebollinos, la albahaca, el perejil y la salvia.

Algunos tomates se han desarrollado para macetas. Los calabacines, las zanahorias y las lechugas en macetas también se podrán cultivar siempre y cuando se planten en una honda que las mantenga con una gran cantidad de compost alrededor de sus raíces.
Los frutos cultivados de esta forma en macetas, con la excepción de las fresas, necesitan gran cantidad de espacio para las raíces por eso es esencial comprar macetas muy grandes.
Cosecha sana
Unas hortalizas bien cuidadas y sanas constituyen una imagen encantadora. Para producir cosechas de esta calidad, el suelo debe ser fértil y las plantas deben recibir una atención regular. Un espacio cerrado supone una producción máxima para un espacio mínimo pero las malezas deben eliminarse del terreno y este debe estar bien abonado y regado, ya que en caso contrario la competencia entre las plantas seria implacable.
Jardín de hierbas
La forma más practica y la más linda de cultivar hierbas es en un parterre. Su constitución formal muestra una excelente selección de especies y además mantiene los mas invasores bajo control. Si se plantan en un solo lugar se puede cosechar fácilmente una extensa gama de hierbas

By Blogsdna

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